Peeling Químico en Málaga

El peeling químico es un procedimiento que consiste en exfoliar la piel con la aplicación de diversas sustancias químicas, con el objetivo de mejorar y restaurar el daño causado por la exposición solar y envejecimiento prematuro. Este tratamiento ayuda a la eliminación de manchas, arrugas finas, poros dilatados, e incluso marcas de acné. Se efectúa generalmente en la piel del rostro, pero también puede aplicarse en otras zonas corporales como escote, espalda, manos, etc.

El peeling ayudará a mejorar el aspecto de la piel ya que al eliminar las capas más superficiales de la epidermis, se produce una renovación de la misma, haciendo que luzca más joven, luminosa y con menos manchas. Consigue por tanto un rejuvenecimiento facial eliminando o suavizando manchas cutáneas, arrugas finas y devolviendo a la piel el color, la textura y el tono perdido con el paso del tiempo y la injerencia de agentes nocivos como el sol , tabaco, alcohol, estrés, etc.

Peeling superficial o peeling medio

En Mética realizamos dos tipos de peeling: el superficial o el medio. En función de la profundidad de peeling escogido, la peladura oscilara desde una descamación imperceptible hasta un recambio epidérmico completo.

También la composición y la concentración del producto o productos utilizados, su modo de aplicación, tiempo de contacto con la superficie cutánea y tipo de piel determinarán el resultado. En función de la patología a tratar, se usarán diferentes productos (ácido salicílico, ácido glicólico, ácido tricloroacético, fenol, ácido láctico, pirúvico, ferúlico) aislados o combinados entre ellos o con otras sustancias activas.

Peeling Químico en Málaga

El tratamiento con peeling químico consta de una a varias sesiones espaciadas más o menos en el tiempo. Cada sesión puede durar entre 15 y 45 minutos. Es imprescindible una adecuada preparación de la piel antes del peeling mediante el uso de cremas específicas. Entre las sesiones se establece un adecuado tratamiento dermo-cosmético para hidratar, reparar y proteger la piel del sol. Al final del tratamiento se establecen las pautas oportunas de mantenimiento que pueden comportar la necesidad de someterse de forma más o menos esporádica a una sesión de peeling, además de los ineludibles cuidados dermo-cosméticos, imprescindibles para aumentar y prolongar los resultados.

En Clínica Mética le asesoramos acerca del tipo de peeling que más se ajuste a sus necesidades teniendo en cuenta la naturaleza e intensidad de las lesiones que sea preciso tratar, así como las circunstancias socio-laborales de cada paciente. En algunos pacientes se puede combinar con otros tratamientos como mesoterápia, implantes de relleno, etc.